Blog / Opinion
C a M i N o A L a V i R g E n - Ultra Trail Bell Ville Saladillo 2020
25-09-2020 - Por Juan Ricardo Ferrero
Todo empezó como siempre, con una locura de mi parte. La pienso, acomodo y ejecuto. Muchas veces no analizo la logística tal cuál debería ser; pero, no es mi mejor característica programar mis desafíos. La virgen de la Merced en Saladillo, provincia de Córdoba fue el objetivo de este camino, y hacia allí fuí.
La virgen de la Merced en Saladillo en la provincia de Córdoba fue el lugar elegido como punto final del recorrido. La pandemia del COVID-19 nos tiene desde hace un tiempo encerrados, quién más o en menos pero atados a no poder trasladarnos dentro del país y mucho menos fuera de él. Por tanto, para mantenerme motivado y en "cierta" competencia me planteo objetivos como lo fueron: Transvulcania, Zegama, UTMB240; antes PACERS FOR HOPE en mi ciudad, y ahora unir dos pueblos: mi ciudad, Bell Ville con Saladillo, distante a casi 60 kilómetros.
Lo pensé, muy poco y sin conocer el camino, ya que desde niño no regresaba a él, comencé a desandar el mismo. A partir de las 7:20 de la mañana justo en uno de los caminos rurales que salen de Bell Ville -hay muchos hacia ese lugar Saladillo- me aliste y comencé a correr.
Travesía - Recorrido
El camino al sur de la ciudad con bastante tierra, no obstante; es de ripio, pero por la gran sequía se tornó complicado para correr y respirar. Luego, me fui acomodando y plantee como primer PC el llamado "Boliche de los 4 Caminos", distante a 13 kilómetros. Con ritmo medio, tranquilo llegué a ese lugar. Me recibieron dos perros, no malos pero bastante toreadores. Al bar, con el que hace muchos años lo atiende "El gordo Pautasso" ¡buen día maestro, todo bien! Buen día, me dijo -con barbijo, increíble entre medio del guadal y lo quedado en el tiempo de su bar-; le dije: ¿tenés café, galletas? No, no tengo. Si querés, hay alfajores, galletitas, etc. Dale, dame un "Jorgito" triple, una Coca Cola y metele un Speed, me lo llevo. Hablamos un rato y me fui.
"Seguí derecho, derecho hasta que topes con un camino y le metes a la izquierda, dale".
Y bueno, ahí nomás le metí pata y le dí. No obstante, llevaba mi celular y el Google Maps, que me salvo de varios caminos que me complicaban el planteado desde el inicio. Por ese lado todo bien. Un zorro, vacas, y mucha agricultura; hacia el sur, destino primero Monte Buey, luego hacia el este, Saladillo.
Acá vino la complicación, ya que desde el inicio había planteado recarga y abastecimiento al km 30 por lo menos -llevaba 4 caramañolas de 500 cc y la Coca-, turrones y un gel, nada más. Sales, electrolitos y demás. No tomo ni como mucho, en realidad.
Pero Edelweis, se metió por otro de los caminos alternativos y salió no detrás mío sino en otro lugar: y bueno, ya iba en el km 47 y nada -solo con esos 2 litros de agua y la Coca para 34 km-; allí, me acalambre un poco, ya que tenía previsto "comer", y esto no estaba, por tanto: "aguantarse". Recién al km 49 -faltaban 6- la encontré, medio deshidratado y perdiendo un poco el ritmo de la carrera. Me acomode, comí y hacia el destino final: La virgen, todo por ruta los últimos 5 km.
Esa fue un poco la historia; llegué en 6h 49m y todo el pueblo estaba cercado, cerrado; tiempos del Covid-19 más allá que yo festejé igual el día de la Virgen -24 de Setiembre-, como lo hacía desde niño.
...y será, hasta la próxima locura... ya veré ¡gracias a todos por seguir mis pasos!
Lo pensé, muy poco y sin conocer el camino, ya que desde niño no regresaba a él, comencé a desandar el mismo. A partir de las 7:20 de la mañana justo en uno de los caminos rurales que salen de Bell Ville -hay muchos hacia ese lugar Saladillo- me aliste y comencé a correr.
Travesía - Recorrido
El camino al sur de la ciudad con bastante tierra, no obstante; es de ripio, pero por la gran sequía se tornó complicado para correr y respirar. Luego, me fui acomodando y plantee como primer PC el llamado "Boliche de los 4 Caminos", distante a 13 kilómetros. Con ritmo medio, tranquilo llegué a ese lugar. Me recibieron dos perros, no malos pero bastante toreadores. Al bar, con el que hace muchos años lo atiende "El gordo Pautasso" ¡buen día maestro, todo bien! Buen día, me dijo -con barbijo, increíble entre medio del guadal y lo quedado en el tiempo de su bar-; le dije: ¿tenés café, galletas? No, no tengo. Si querés, hay alfajores, galletitas, etc. Dale, dame un "Jorgito" triple, una Coca Cola y metele un Speed, me lo llevo. Hablamos un rato y me fui.
"Seguí derecho, derecho hasta que topes con un camino y le metes a la izquierda, dale".
Y bueno, ahí nomás le metí pata y le dí. No obstante, llevaba mi celular y el Google Maps, que me salvo de varios caminos que me complicaban el planteado desde el inicio. Por ese lado todo bien. Un zorro, vacas, y mucha agricultura; hacia el sur, destino primero Monte Buey, luego hacia el este, Saladillo.
Acá vino la complicación, ya que desde el inicio había planteado recarga y abastecimiento al km 30 por lo menos -llevaba 4 caramañolas de 500 cc y la Coca-, turrones y un gel, nada más. Sales, electrolitos y demás. No tomo ni como mucho, en realidad.
Pero Edelweis, se metió por otro de los caminos alternativos y salió no detrás mío sino en otro lugar: y bueno, ya iba en el km 47 y nada -solo con esos 2 litros de agua y la Coca para 34 km-; allí, me acalambre un poco, ya que tenía previsto "comer", y esto no estaba, por tanto: "aguantarse". Recién al km 49 -faltaban 6- la encontré, medio deshidratado y perdiendo un poco el ritmo de la carrera. Me acomode, comí y hacia el destino final: La virgen, todo por ruta los últimos 5 km.
Esa fue un poco la historia; llegué en 6h 49m y todo el pueblo estaba cercado, cerrado; tiempos del Covid-19 más allá que yo festejé igual el día de la Virgen -24 de Setiembre-, como lo hacía desde niño.
...y será, hasta la próxima locura... ya veré ¡gracias a todos por seguir mis pasos!
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